Bienvenidos mis estimados
lectores a una nueva entrada de quien tiene la razón, la número 63 para ser más
exactos
Hace poco estuve en una boda, en
“la hora loca” nos dieron antifaces para bailar y me puso a pensar cómo es que
una mascarilla pude resultar una experiencia liberadora, el no ser vistos, el
sentirnos protegidos incrementa el libre albedrío sobre todo si quien la usa es
una persona que no le gusta expresarse mucho corporalmente y más si el que la
usa es hombre y le agregas algo de licor,
puede llegar a ser el alma de la fiesta (se han dado cuenta que la mayoría de
chicos que va a una fiesta tienen la necesidad de desinhibirse con el alcohol
para empezar a bailar o ser más sociables).
Pero en la vida diaria también se
usan mascaras que no físicamente visibles para ocultar las verdaderas intenciones,
sentimientos, en fin diversas cosas, en forma de protección, como una
autodefensa, o simplemente disimular la realidad .
Tenemos a las personas que viven
de las apariencias porque piensan que la gente lo ve solo por lo que tiene,
que carro maneja o cuánto dinero gasta y
que no las valorarán por quienes realmente son, mis queridos enmascarados si
conocen gente así (porque las hay) es gente que no vale la pena impresionar,
podrá ser ventajoso, sí pero al final de cuentas no vale la pena.
Hay personas que usan una máscara
para ocultar su espontaneidad, sus ocurrencias, no sé si para ocultar su
vulnerabilidad, porque tienen simplemente la necesidad de no mostrar su verdadero
yo o evitar no ser tomadas seriamente. Quien sabe el motivo, he conocido varias
personas así y aunque muchos lo duden una vez que ven su verdadero yo, son
realmente geniales y divertidos. Supongo que consideran que pueden ser así con
la gente que realmente valga la pena… o la que no les queda de otra porque las
ven a diario y en el menor descuido se les cae la máscara.
No olvidemos a la máscara de la
rudeza, la persona que la utiliza usualmente le gusta ser cruel o maltratar a
los demás, les gusta que la gente les tema, esa es una de las máscaras más
tristes pues, ocultan dolor y miedo, como los niños que golpean a otros niños,
es porque alguien los ha golpeado, así que como autodefensa deciden ser malos
para evitar que alguien más se atreva a ser malo con él.
Ya por último quiero hablar de
una máscara muy peculiar, que aunque no es del todo buena para quien la usa, lo
es para quien la mira, es la de la sonrisa, la persona puede estar muriendo por
dentro, pero siempre te muestra una sonrisa que te alegra e día, están ahí
cuando las necesitas, escuchan tus penas, te dan consejos y salvan el día. Con
ellas aplica el dicho de la procesión va por dentro y solo se la quita con
personas que la quieran escuchar, las que
dan cuenta a través de la máscara
la realidad que hay.
Hay muchos tipos más de máscaras,
estas no solo la usan las personas por maldad y justificar los medios para llegar
a un fin, también se usa para protegerse,
y no quedar expuestos,. En algún momento en nuestras vidas las usamos, ¿Cuál
has usado tú? COMENTA AQUÍ.
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Bueno mis estimados, aquí le
muestro otros tipos de máscaras, amor clandestino, The lazy song, I Wanna Rock N Roll All Night, y para el gran final, Spiderman - Ramones
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Hasta la próxima!!!!
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